Un médico de California se declaró culpable ante una corte federal en Los Ángeles por haber suministrado de manera ilegal ketamina al actor Matthew Perry, semanas antes de su fallecimiento en octubre de 2023.
El doctor Salvador Plasencia, de 69 años, admitió haber distribuido el potente anestésico sin una justificación médica válida. Según el acuerdo presentado ante el tribunal, Plasencia facilitó varias dosis de ketamina al actor y a su asistente entre finales de septiembre y mediados de octubre de 2023, sin la debida supervisión profesional y en contextos no clínicos.
Los hechos
De acuerdo con documentos judiciales, el médico entregó el fármaco en al menos tres ocasiones, incluyendo una entrega realizada en un estacionamiento de Long Beach, California. En una de las sesiones, Matthew Perry mostró signos de malestar, pero el tratamiento no fue interrumpido. Poco después, el asistente del actor administró otra dosis que había sido dejada por el médico, según admitió el propio Plasencia en su testimonio.
El actor fue hallado sin vida el 28 de octubre de 2023 en el jacuzzi de su residencia en Los Ángeles. La autopsia confirmó que la causa de muerte fue una sobredosis aguda de ketamina combinada con ahogamiento.
Consecuencias legales
El Dr. Plasencia enfrenta una condena máxima de 40 años de prisión federal y una multa de hasta dos millones de dólares. No obstante, como parte del acuerdo con la fiscalía, la sentencia podría ser reducida. Su comparecencia final está programada para el 3 de diciembre de este año, fecha en la que también se espera que entregue su licencia médica.
Este caso forma parte de una investigación más amplia que involucra a otras cinco personas vinculadas con la distribución del anestésico al actor. Entre ellas se encuentran otros profesionales de la salud y distribuidores no autorizados.
Uso creciente de ketamina
La ketamina, originalmente utilizada como anestésico, ha ganado popularidad en tratamientos alternativos para la depresión y el trastorno de estrés postraumático. Sin embargo, su administración debe realizarse bajo estricta supervisión médica. Las autoridades federales han reiterado que su uso indebido puede tener consecuencias fatales.
Contexto local
En ciudades como Miami, donde han proliferado clínicas privadas que ofrecen terapias con ketamina, este caso genera preocupación sobre los controles regulatorios. Expertos en salud mental han advertido sobre el riesgo de banalizar el uso de sustancias controladas, especialmente en un contexto de creciente demanda de tratamientos alternativos.